​Jorge había trabajado por más de diez años para un conocido restaurante. Fue despedido sin que se le diera un motivo y no se le había entregado el pago de finiquito alguno. Jorge había estado subcontratado por diversas empresas, por lo que no era fácil demostrar que tenía relación laboral con el restaurante. Después de exhibir en audiencia de ofrecimiento y admisión de pruebas, documentos que demostraban la existencia de una indebida subcontratación a lo largo de los diez años que había laborado para el restaurante, se logró un arreglo donde Jorge Recibió el pago de las cantidades que, conforme a la Ley, tenía derecho a recibir, más una indemnización por el despido.

​Paussat era un empresario que había vendido su negocio de artesanías. Después de dos años le llegó una notificación a su domicilio particular, donde se le solicitaba el cumplimiento de un laudo en su contra por demanda entablada por un trabajador del entonces negocio de artesanías; condenándolo al pago de diversas prestaciones a favor del trabajador, y para el caso de negativa se le embargarían bienes. Después de entablar una defensa constitucional; se logró dejar sin efecto todo lo actuado en el Procedimiento Laboral, a razón de que este jamás había sido llamado a la defensa de sus intereses; dejando sin efecto el laudo en su contra.